Siempre me han fascinado las películas de animación. Mi alma infantil se deleita con ellas, salgo del cine haciendo volteretas, iluminada de colorines… Hacen que me crea más la vida, que apueste por ella.
Inside out es una maravilla. En esta ocasión, además, la peli habla de las emociones!!! Animación y psicología se aúnan y parece que la han creado para mí
– Cinco personajes. Alegría, Rabia, Miedo, Tristeza y Asco.
– Ideas y pensamientos en forma de canicas brillantes, de colores diferentes en función de la tonalidad emocional.
– La fábrica de los sueños.
– El inconsciente.
– El pensamiento abstracto.
– Los “basureros” que eliminan recuerdos de la memoria.
– La memoria a largo plazo como un laberinto infinito.
Algo es una gran idea cuando te planteas por qué narices a nadie se le ha ocurrido antes. Y es que la mente, nuestra mente, es el paraíso de los parques de atracciones. Es el arma más poderosa. Una infinitud de historias en el ático de nuestro cuerpo.
Y aquí vienen los señores de Pixar-Disney y se sacan de la manga un universo animado inspirándose en nuestra psique. B-R-A-V-O
Y no sólo eso. En la película, sólo aparecen 5 emociones. La protagonista es una niña y los pensamientos tan sólo hacen acto de presencia un par de veces…
De aquí sale una segunda, una tercera y hasta una saga de Inside Out. ¿Cómo representarán el mecanismo emocional cuando la protagonista se enamore?
¿ O cuando viva un duelo? ¿ O el día que tenga un hijo?
Lo pienso, lo imagino, y los protagonistas animados de mi cabeza se alborotan. Mi Alegría me sacude intensamente y mi Rabia me pega bocinazos diciéndome: “por qué no se te habrá ocurrido a ti antes, pedazo merluza!!!!!”
“Las emociones no pueden dimitir” porque son parte de nuestra esencia, porque sin ellas, la vida no tendría sentido. Porque sin las buenas y sin las malas, nuestros recuerdos carecerían de dirección.
En definitiva, una auténtica delicia. Pasen y vean … y vuelvan a ver.